Us sudor frío se abre paso hacia el resto del cuerpo, reptaba sin prisa pero sin pausa, buscando un destino incierto. Su cuerpo se escoraba en ambas direcciones buscando un acomodo inexistente. El tiempo pasa lentamente, como si por primera vez no tuviera prisa y la lucha interna busca un vencedor que no se presta.
Veinte minutos de brutal batalla agotan el cuerpo que yace en la cama, la contienda no esta perdida y cada uno de los órganos en lucha buscan ganar la guerra. Su entrada al campo de todas las batallas es agónica, el tiempo se acaba y el lo nota. El pecho se rompe, se rasga y se quiebra. Pero todo acaba, el dolor deja camino al bienestar y al gozo, lo peor ya paso.
Una nueva vida, un nuevo horizonte por el que caminar, un regalo que disfrutar. La vida se regenera, se reinventa y toma nuevos caminos, nueva formas y nuevos destinos.
Sudor frío que te habres paso hacia el resto del cuerpo, descansa en paz.
2 comentarios:
esto me suena conocido, hermanos. Un inmenso abrazo. Y gracias por haber estado allí
Las "gracias" para los curas que las ganan cantando.... no te jode. Se te quiere, un besazo.
Publicar un comentario